Las lunas son uno de los elementos que más accidentes sufren en los coches y también una de las coberturas más desconocidas dentro de los seguros, sobre todo los obligatorios para automóvil. Hoy te contamos qué entra en los seguros de lunas para que sepas qué cubre esta garantía.
Cobertura de lunas: porqué es buena idea
Cada año, miles de lunas de coches sufren accidentes mientras están en circulación o mientras el vehículo está aparcado. La reparación de estos elementos, puede ser además de difícil costosa si no tenemos la cobertura en nuestra pólizas. Y es que, actualmente solo un 25% de los seguros hechos a automóviles en España, incluyen esta cobertura.
Esta cobertura se encuentra en los seguros a terceros ampliados y cubre la reparación o sustitución de la luna en caso de accidente. Tanto si son lunas delanteras, laterales o lunetas.
¿Qué situaciones cubre la cobertura de lunas?
Antes de ver en qué situaciones esta cobertura nos cubriría las lunas del vehículo, vamos a dejar claro que cualquier seguro que incluya esta garantía cubrirá solo los casos en los que las lunas se hayan visto afectadas por causas ajenas al conductor. Es decir, un accidente, vandalismo o situación en la que el conductor asegurado no tenga una culpa cierta.
Si tenemos un accidente de este tipo, como puede ser que nos rompan la luna mientras nuestro coche se encuentra aparcado, tendremos que dar parte al seguro y tendremos la oportunidad de reparar, sustituir o ser indemnizados por el daño.
En contra de lo que se cree habitualmente, una compañía aseguradora no puede imponer ningún taller de reparación al conductor del vehículo, este es libre de acudir al taller de confianza que más se ajuste a sus necesidades y pasar la factura a la compañía para que le reembolse el dinero.
Sin embargo, todas las compañías tienen centros adheridos que recomiendan para además de hacer el procedimiento más sencillo tener unas condiciones más favorables con el taller en cuestión a la hora de subsanar el trabajo.
¿Cómo hacer un parte por rotura de luna?
Un parte por luna rota es una situación muy común: desde pequeñas piedras proyectadas por camiones a turismos que desquebrajan el cristal, hasta un bache pueden ser motivo de rotura de los cristales. Si estás en esta situación dar parte es muy sencillo.
Solo tienes que llamar a tu seguro, o bien por la aplicación móvil de tu compañía o corredor y te darán el contacto del taller de confianza al que llevar tu vehículo (en caso de que quieras hacer la reparación con este taller) una vez tengas el número de teléfono será tan fácil como pedir cita y ni siquiera tendrás que pagar la factura pues será abonada por la compañía.
En el caso de que no quieras utilizar los proveedores que te recomienda la compañía, tendrás que avisarlo y preguntar cómo enviar la factura de la reparación (a través de qué medio) y a quien.
Qué cosas no cubre el seguro de lunas
La cobertura de lunas no cubre elementos como:
- Espejos retrovisores interiores ni exteriores
- Faros del vehículo
- Intermitentes del coche
¿Qué pasa con el techo solar?
El techo solar del coche es uno de los elementos más caros de reparar de todo el coche. Si tienes un techo solar deberás asegurarte de que lo cubre la póliza ya que, no suele estar integrado en este tipo de coberturas. Sobre todo si el techo solar no es un elemento de serie en el vehículo ya que, no se considera una luna.
Siempre te va a salir más rentable incluir el techo solar que repararlo en caso de accidente. por eso, lo más inteligente es hablar con un mediador especializado que te busque el mejor seguro para coche con lunas y techo solar incluido a un buen precio.
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